Cerdas naturales y madera.

Comenzar cepillando desde los pies con movimientos ascendentes largos y fluidos, sin ejercer demasiada presión. Continuar por los brazos del mismo modo. En abdomen y espalda, los movimientos han de ser circulares. Terminar en escote y cuello (nunca en el rostro) de forma muy suave pues son zonas más sensibles. Óptimamente, utilizar cada mañana, no más de 5 minutos, antes de la ducha. En su defecto, al menos 2 veces a la semana. Ducharse con agua tibia y cualquiera de nuestros jabones sólidos o nuestros geles de ducha que son 100% respetuosos con la piel, terminar con agua fría durante unos segundos y secar. Cuándo no utilizar: Evitar el cepillado en seco cuando la piel tenga quemaduras, picazón o rojeces. No cepillar sobre lunares, verrugas, lesiones o zonas de la piel inflamadas. Si sufres de piel ultra sensible o con problemas dérmicos.